Vimos una hermosa casa de la que nos quedamos enamorados... íbamos a reservarla y todo, pero las cosas no se dieron por motivos que Dios dispuso.
Resultó siendo parte del engaño de EVENTOS MARAVILLOSOS y felizmente no dimos ni un sol. Pero seguimos prendados de esa casa hasta hoy.
Y hallar otra que nos guste y que tenga todo lo que ansiábamos (Playa, jardín, piscina, dentro de la ciudad, a buen precio) no está resultando tan fácil.
Seguiremos en la búsqueda de ese lugar especial.