Las invitaciones de boda son las encargadas de anunciar al mundo que han decidido unir sus vidas para siempre. Eso quiere decir que son el primer acercamiento formal de su boda con los invitados. Por ello, no son algo que se deba tomar a la ligera, ¡todo lo contrario!
Estoy segura de que tienes mil y un dudas con respecto a cómo hacer las invitaciones perfectas. Así que sigue leyendo y toma nota de estas 10 reglas básicas:
Si la boda se realizará en el lugar donde viven, las invitaciones deberán ser entregadas dos meses antes.
Por otro lado, si el enlace será lejos de donde viven, por ejemplo, en la playa, un Pueblo Mágico o un jardín afuera de la ciudad, entreguen las invitaciones tres meses antes. Así darán a los invitados tiempo suficiente para organizarse, reservar hotel o boletos de avión.
Manden a hacer las invitaciones con tiempo: entregarlas con poco tiempo no es de muy buen gusto, y además, no querrán que les agarren las prisas al confirmar los asistentes y su acomodo en las mesas.
Lo que no se les puede pasar: poner el lugar de la boda, la fecha y hora, eltipo de evento (formal, semiformal, etc.) y la información de la mesa de regalos.
Eviten poner mucha información en las invitaciones. ¿Lo mejor? Que sean lo más concisas posible.
En la invitación no deben faltar el nombre de los novios así como de sus papás.
Hay dos formas de redactar el texto de la invitación; éste depende de si la boda está siendo pagada por los papás o por los novios. Les dejo ejemplos de los dos casos:
Si los papás del novio, la novia o ambos son divorciados, se tiene que poner el nombre de cada uno con sus apellidos de solteros. Si alguno ya falleció se pone una cruz al lado de su nombre. Por último, si los novios no tienen contacto con alguno de sus padres pueden decidir si poner o no su nombre en la invitación.
Finalmente, si se trata de una boda tradicional, el nombre del novio deberá ir antes que el de la novia.
¿Una regla extra? Asegúrense de elegir una tipografía que sea fácil de leer.